"- Reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, la proporción de personas que sufren hambre.
- Reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, la proporción de personas cuyos ingresos son inferiores a un dólar diario.
- Conseguir pleno empleo productivo y trabajo digno para todos, incluyendo mujeres y jóvenes. "
Eso se supone que habría de cumplirse en un plazo de, actualmente, tres años. Pero si ya no íbamos por muy buen camino para conseguirlo, tras los recientes recortes implantados, de hasta el 73% de fondos destinados a la cooperación al desarrollo, el objetivo huye de nuestras manos a una velocidad preocupante.
El miércoles 17 de este mes en Vigo y en otras 31
ciudades españolas, muchas personas en apoyo a esta Campaña por la
Pobreza Cero tomaron las calles para hacer recordar que los problemas de
la pobreza y el hambre están ahí, que no sólo existen y debemos
acordarnos de ellos esta semana y que está en nuestra voluntad cooperar y
actuar; además de para denunciar el atraso que suponen los recortes
instaurados por los gobiernos.
¿No se supone que un gobierno existe, en parte, para promocionar el
bienestar y el desarrollo de una sociedad? ¿Así es cómo se consigue?
Se
puede pensar que esto no sirve de nada, que, por ejemplo, proyectos de
ONGs o las propias organizaciones en sí, dejarán de funcionar debido a
la falta de subvenciones y que las nuevas leyes de ahorro presupuestario
no mudarán... Probablemente así será.
Pero para conseguir grandes cambios, se necesitan pequeñas acciones.
Estoy
segura de que eso es lo que piensan las más de cien personas en Vigo, y
miles en España, que el miércoles se atrevieron a romper el silencio de
otros: conformistas, resignados o simplemente desinteresados. Porque lo
que piensas y tu opinión, es algo ningún gobierno puede recortar.
Rebélate, tu voz cuenta.
Para más información: http://www.rebelatecontralapobreza.org/
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